Tener una tarjeta de crédito, ya sea personal o empresarial, se traduce en muchos beneficios a nivel financiero. Antes de solicitarla te recomendamos conocer las ventajas de las TDC. Así podrás elegir la mejor tarjeta de crédito para ti.
Las tarjetas de crédito sin duda alguna nos facilitan la vida. No sólo sirven para disponer de efectivo y pagar nuestros gustos o caprichos. Además, nos ayudan a cubrir gastos de mayor importancia en relación a los alimentos o la salud. Incluso servicios como Internet y la telefonía móvil.
Sin embargo, las ventajas que te otorga una tarjeta de crédito van más allá del beneficio de pagar productos o servicios. Poseer este elemento te educará a nivel financiero y te abrirá puertas a préstamos que te ayuden a alcanzar metas de vida o negocio.
Entre las ventajas más importantes de tener una tarjeta de crédito están:
Buen historial crediticio
Con el uso de este destacado instrumento puedes construir un historial crediticio. En sí, podrás contar con un registro de tu comportamiento financiero, que se guardará en el Buró de Crédito.
Si eres un buen cliente y pagas tus deudas puntualmente, tendrás un historial crediticio positivo. Esto sumará un punto a tu favor, ya que para los bancos serás el candidato perfecto para el incremento de límites de crédito o la concesión de préstamos más grandes.
Control de gastos
Cuando tienes una tarjeta de crédito el banco te hace llegar un estado de cuenta cada mes. En él se detallan minuciosamente montos de gastos realizados, tasas de interés, cuotas por pagar, fechas límite y cobro por conceptos de mantenimiento si aplica, entre otros.
Con ello obtienes un mayor control sobre tus gastos, porque puedes conocer a detalle en qué estás invirtiendo tu dinero. Al tener tales datos, te vuelves más consciente de cómo estás manejando tus finanzas, lo cual te será útil para mantenerlas en un estado sólido.
Recomendamos: Esta es la Forma Más Sencilla para Hacer tu Presupuesto Personal
Banca por internet
En el mundo actual donde prácticamente todo es digitalizado, manejar nuestros productos financieros a través de internet es una necesidad. Esto sin contar con el beneficio de la seguridad y rapidez que nos brinda el uso de esta modalidad.
Actualmente puedes realizar pagos y otras transacciones con sólo ingresar en la página web o app de tu banco. ¿Lo mejor de todo? La posibilidad de hacerlo desde la comodidad de tu hogar o trabajo, sin la obligación de acudir a una sucursal.
Recompensas
No elijas cualquier tarjeta ofrecida por el banco. Lo ideal es que busques una tarjeta de crédito con recompensas o promociones, según tu estilo de vida y prioridades.
¿De qué se trata el método de las recompensas? Las compañías de tarjetas de crédito se enfocan en incentivar el consumo, al otorgar algún tipo de ventaja al cliente; en ello, lo importante será identificar las más beneficiosas.
Si por ejemplo utilizas poco tu vehículo, no será provechoso optar por una tarjeta que brinde combustible como recompensa. Por el contrario, si viajas frecuentemente por negocios, debes seleccionar aquella con ventajas o descuentos en boletos, hoteles y transporte.
Hacer compras y diferirlas a meses
Esto es quizá uno de los mayores beneficios de una tarjeta de crédito. Podrás disponer de dinero inmediato sin necesariamente tenerlo en tu cuenta bancaria. En ocasiones evitamos realizar un gasto por carecer de recursos, pero con una tarjeta podemos disponer de fondos sin problema.
Al momento de querer comprar sacas el plástico, pagas en el comercio y luego deberás cubrir en mensualidades el monto consumido, aunque a veces con intereses.
¿Cómo elegir la mejor tarjeta de crédito? Ya leíste los beneficios y ventajas de este instrumento financiero, así que ahora veamos las claves para elegir la mejor tarjeta de crédito del mercado.
Elige de acuerdo a tu ingreso
Tu nivel de ingresos será determinante para elegir una tarjeta acorde a tu capacidad de pago y para identificar la ideal para ti: clásica, oro o platino. Este punto es realmente importante, dado que dictará si puedes o no asumir las cuotas mensuales.
Lo recomendable es seleccionar una tarjeta de crédito cuyos consumos no excedan el 20 o 25% de tus ingresos. De esta forma no verás mermado tu ahorro, ni afectarás tus gastos fijos del mes.
Considera tus gastos mensuales
Otro punto a considerar son tus gastos, compromisos y deudas mensuales. ¿Por qué es relevante? Porque al conocer en qué se va la mayor cantidad de tu dinero, puedes optar por una tarjeta con ventajas según tus egresos.
Por ejemplo, si la usas para tus gastos de alimentación o servicios como internet o telefonía, debes tener clara la anualidad, intereses y comisiones que te cobre el banco por estos conceptos.
Tu historial crediticio
Antes de dar una tarjeta de crédito, el banco consultará tu historial crediticio. Si tienes un récord positivo, las oportunidades de obtener la tarjeta aumentarán. Si por el contrario, tu historial es negativo, tus posibilidades se cerrarán y sólo podrás recurrir a la opción de pedir una tarjeta garantizada o asegurada.
Dicho instrumento se respalda por el dinero que tengas depositado en el banco, con la desventaja de un crédito limitado o condicionado a tus depósitos. Si tus ahorros son bajos, tu crédito también lo será.
Conclusión
Como puedes ver, son múltiples los beneficios. Podemos resumir que los aspectos de mayor relevancia para elegir la mejor tarjeta de crédito, será tu capacidad de pago y tu historial crediticio.
Si te encuentras en la necesidad de diferir el saldo de una TC actual y mantener un buen historial crediticio. Sigue leyendo.
Te invitamos a conocer nuestro servicio aquí. A través del cual puedes financiar tus compras y pagar en los plazos que elijas, en cómodas cuotas.